Trump sobre Israel y mártires de Al Aqsa en Venezuela
Donald Trump en 2011. Foto: Gage Skidmore/Wikimedia Commons
Además de acoger y suplir pasaportes limpios a terroristas de Hezbolá, el régimen chavista de Venezuela da cobijo a células terroristas estrictamente palestinas, según información oficial robada a la inteligencia chavista por el grupo de hackers venezolano Team HDP (¿hijos de puta?). Estos pequeños núcleos de terroristas se dedican en suelo venezolano a “lavar dinero, traficar con droga y [a] actividades terroristas”, según una noticia sobre las revelaciones de los hackers publicada ayer en exclusiva por Israel Hayom. Una de las células pertenece a las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, el brazo armado de Fatah, y está formada por al menos cuatro individuos que se hacían pasar por médicos del sistema público de salud venezolano (es un decir) en el estado de Mérida. El informe obtenido por los hackers asegura que varios pacientes han muerto a manos de los falsos doctores, que al parecer no saben demasiado de medicina.
Durante su intervención en la cumbre para el clima de Glasgow, el primer ministro de Israel, Naftali Bennett, dijo que Israel puede ser clave en los esfuerzos contra el cambio climático. Bennett recordó que Israel es el país “con más start-ups per cápita del mundo”, y abogó por dirigir esa pujanza innovativa hacia la búsqueda de soluciones para reducir la contaminación, proteger la naturaleza y combatir la desertificación, como el Estado judío ha hecho a lo largo de su corta historia con resultados espectaculares. El primer ministro dijo el domingo al respecto que su gobierno quiere crear un fondo para apoyar a emprendedores israelíes que desarrollen tecnologías verdes. (Times of Israel)
El ejército israelí ha comenzado unas maniobras militares de un mes en el norte del país que simulan una potencial situación de guerra abierta con Hezbolá, el partido-milicia islamista chiíta libanés apoyado por Irán y Siria.
Una delegación israelí que incluye a un representante del Mossad ha viajado a Sudán para reunirse con la nueva junta militar golpista del país árabe. Los emisarios israelíes buscan establecer si la caída del anterior gobierno afectará al acuerdo para normalizar las relaciones entre los dos países firmado antes del golpe. A diferencia de EEUU y otras democracias, Israel no ha condenado hasta el momento el derrocamiento del gobierno. Jerusalén parece apostar por el pragmatismo y buscar continuar con el deshielo con los militares que ahora quieren consolidarse en el poder en Jartún. (Israel Times)
El expresidente estadounidense Donald Trump ha lamentado en una entrevista cómo Israel ha perdido la enorme influencia que tenía hasta hace poco en el Congreso de EEUU. Hace sólo una 10 o 15 años, dijo Trump, “Israel era, literalmente, el dueño del Congreso”. “Hoy es casi lo contrario”, lamentó el expresidente, que criticó a las congresistas demócratas Alexandria Ocasio Cortez e Ilhan Omar: “esta gente odia a Israel” y “controla el Congreso”. Pese a que Trump se quejaba de esta pérdida de influencia por parte del Estado judío, algunos comentaristas han tachado sus palabras de antisemitas, por abundar en la vieja teoría conspiratoria de que los judíos controlan el poder político en EEUU. Las palabras de Trump, sin embargo, dejan poco lugar para interpretaciones maliciosas. “Israel tenía un gran poder -y así debía ser- sobre el Congreso, y ahora no lo tiene. Es increíble”, dijo también el presidente.
Un informe del ejército israelí ha concluido que al menos dos mandos militares vejaron a soldados ultraortodoxos del batallón Netzah Yehuda, diseñado para que los judíos más religiosos puedan contribuir al esfuerzo militar del país. Una de las víctimas de estos abusos denunció el año pasado haber sido agredido por no correr lo suficientemente rápido. Otro soldado religioso explicó que se orinó encima y sus superiores le obligaron a permanecer todo el día con la ropa mojada. A varios militares ultraortodoxos se les negó tratamiento médico y la posibilidad de rezar, pese a que las rutinas de la unidad están concebidas para que puedan hacerlo. Uno de los comandantes responsables perderá el puesto, mientras que el otro será sancionado. (Times of Israel)
El rabino ultraortodoxo Eliezer Berland, que ya cumplía una condena por evadir impuestos, ha sido puesto bajo arresto también por su implicación en dos asesinatos en 1986 y 1990. Los crímenes habrían sido perpetrados por las llamadas “patrullas de la modestia”, con que algunos grupos integristas ultraortodoxos hacían cumplir sus estrictas normas de decoro y castigaban a los disolutos. La policía cree que Berland ordenó a sus seguidores a secuestrar y dar su merecido a las dos víctimas. El caso se reabrió hace unas semanas, al aparecer nuevas informaciones sobre los dos crímenes. Dos personas de la secta de Berland -que tiene por nombre Shuvu Banim y sigue las enseñanzas del rabino Najman de Breslov- fueron detenidas el mes pasado por su relación con las muertes. (Jerusalem Post) Para más información sobre Berland, pueden leer este artículo que escribí hace años para Jotdown sobre su proceso de extradición a Israel desde Sudáfrica.